viernes, 6 de abril de 2012

Viajar a París embarazada

Si estás embarazada y pensás volar a París (o ir en tren) acá te cuento mi experiencia personal para que evalúes si es el viaje que esperas o no...

París es una ciudad magnífica, conmovedoramente bella. Sin duda, al menos para mí, es una de las polis más lindas de Europa.

Su arquitectura, sus monumentos, sus enormes pulmones verdes y su gastronomía la convierten en un destino más que interesante para visitarla durante todo el año (aunque claro, en primavera y verano es siempre mejor).

La única contra de París es su tamaño. Se trata de una ciudad grande, donde tienes que estar dispuesta a caminar para conocerla. Tiene tanto para ver...

Volar embarazada: ¿una opción?

Este tema ya lo hablamos en un post anterior. Volar embarazada es posible, por supuesto si tu médico te lo permite. Es cierto que si el embarazo está avanzado (en el tercer trimestre) no te será tan cómodo y posiblemente algunas aerolíneas no te permitan hacerlo después de la semana 28.


Algunas compañías aéreas, sin embargo, permiten a las embarazadas de un solo bebé volar hasta la semana 36 con permiso médico (en el caso de Ryanair por ejemplo debes descargar un formulario que debe completar tu médico) y hasta la semana 32 en caso de embarazo múltiple.

En cualquier caso, será tu médico quien tenga la palabra final. Eso sí, ten en cuenta que los viajes largos no se recomiendan. Un vuelo de 2 horas es posible pero más... ¡no te lo aconsejo!

París, ¿una ciudad friendly con las embarazadas?

Por lo general, y en base a mi propia experiencia, los franceses suelen ser muy amables con las embarazadas. Si te tomas el metro (subte) seguramente te darán el asiento y lo mismo sucede en los demás métodos de transporte. 

Cuando la gente nota que estás embarazada suavizan sus actitudes y tienen ciertos gestos de gentileza que no son tan comunes en muchas otras grandes ciudades.

Prioridad para embarazadas en la Tour Eiffel

Sí, aunque no lo creas, estar embarazada puede ser una ventaja a la hora de visitar el símbolo de París. Las filas para subir a la Tour Eiffel suelen ser interminables pero si estás embarazada (y se nota, por supuesto) te recomiendo acercarte a un guardia y explicar tu situación.

Sin demoras, te harán pasar junto con tu pareja por un costado reduciendo una espera de al menos 2 hs a tan sólo 20 minutos aproximadamente.

El Louvre embarazada

Aquí también tendrás la ventaja de esquivar la fila. Acércate a un guardia y explica tu condición. Así de fácil entrarás en el museo sin esperas.

Eso sí: ten en cuenta que el Museo Louvre es inmenso y deberás subir y bajar cientos de escalones. Por supuesto, el museo cuenta con ascensores para uso de embarazadas pero no por ello evitarás algunas escaleras. Si tienes mucha retención de líquido y las piernas hinchadas, quizás sea demasiado para ti.

Utiliza el metro o subte

Sin duda, el metro o subte es un gran aliado. París está muy bien conectada, encontrarás líneas que te llevan a cualquier lugar y la verdad, funcionan muy bien. Las esperas suelen ser cortas (de entre 1 y 2 minutos) y con combinaciones llegarás a todos lados.

Notre Dame: esperar aunque estés embarazada

Si vas a Notre Dame durante el fin de semana no te quedará otra opción que esperar. Sí, aquí no hay nadie que pueda ayudarte a esquivar la fila. Así que prepárate para unas largas filas, al menos el fin de semana.

Sacré Coeur, una larga caminata

Y en subida... Ten en cuenta esto si pretendes acercarte a la maravillosa Iglesia del Sagrado Corazón. Eso sí, también puedes tomar el trencito y llegar cómodamente sin perder el aliento hasta la cima de esa colina.

París tiene mucho por ver y conocer, aquí tan sólo te menciono algunos consejos que pueden serte útiles... ¡Espero que te sirvan!

Imagen: jdurham

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